SEGUNDA PARTE DEL CALENDARIO INCA.............
9° Chacrayapuy Quilla (Agosto)
Luna de la Siembra, mes de sembrar las
tierras en medio de cantos de triunfo.
Período de la purificación humana, se
sacrificaban llamas, cuyes, mullu, chicha y sanco, se convidaban comidas y
bebidas a las familias.
10° Coya Raymi (Setiembre)
Luna de la Fiesta de la Luna, mes de plantar.
Pascua del Agua, ceremonias pidiendo el
líquido fecundante de la tierra, se dedican ritos a la luna, era una fiesta
especial de las mujeres.
11° Uma Raymi Quilla (Octubre)
Luna de la Fiesta de la Provincia de Uma,
tiempo de espantar a los pájaros de los campos cultivados.
Se realizan ceremonias para que la tierra
sea fecundada
12° Aya Marcay Quilla (Noviembre)
Luna de la Fiesta de la Provincia de
Ayamarca, tiempo de regar los campos.
Se dedican a actos religiosos de culto a
los muertos y honrar la memoria de los antepasados.
El
Calendario Inca estaba relacionado con los ciclos del Sol y de la Luna hasta es
de suponer que además tuviera en cuenta el movimiento de otros astros (la
estrella Sirio). Había un Calendario Imperial, pero al mismo tiempo existían
Calendarios Regionales ajustados a las necesidades agrícolas de cada zona
(ubicación de tierras, climas, etc.). El calendario Inca era al mismo tiempo un
calendario agrícola y religioso, la mitad del año era el semestre del Inca y el
Sol, el semestre masculino. La otra mitad era el semestre femenino de la Luna y
la Coya.
En
diciembre, con la Fiesta del Cápac Inti Raymi, comenzaba la fiesta del Huarachico
en la cual eran iniciados como varones los jóvenes de la nobleza Inca. El
ritual era muy complicado e incluía ayunos, esfuerzos y combates simbólicos.
Los jóvenes se identificaban con los animales representativos del valor: El guamán
(Halcón) y el puma. Toda la festividad duraba tres semanas. Al final de las
cuales eran declarados Guamanes del Imperio.
Las
fiestas más importantes eran celebradas en los meses de diciembre, junio y
setiembre. Correspondía, respectivamente, a la Fiesta de Huarachico
(Diciembre), a la fiesta del Inca y el Sol: junio (Inti Raymi) y a la
fiesta de la Coya y La Luna (setiembre). El Inti Raymi o Fiesta del Sol,
celebrada en Junio, permitía al Inca desempeñar sus funciones religiosas de
intermediario entre la tierra y los poderes celestes. Se hacían numerosos
sacrificios.
En
la fiesta Coya Raymi eran expulsados del Cuzco todos aquellos que no
fuesen Incas, debían salir también los enfermos, el Cuzco debía ser joven y
limpio, en medio de ceremonias eran expulsados los males y las desdichas.
Según
las crónicas de los conquistadores españoles, en Cuzco, la capital del imperio
Inca, existía un imponente calendario solar de carácter público, el cual estaba
constituido de pilares de 5 metros de altura, cada uno. Los pobladores
podían establecer la fecha, por la extrapolación visual de los pilares hacia el
horizonte.
La
cultura Inca deriva de un calendario lunar, en principio, a uno solar. Como
deidad preponderante en la cosmología inca, el Sol era el centro de toda su
atención. Para su observación se destinó plataformas de piedra (Ushnus)
situados en lugares apartados.
Investigadores
han propuesto un tercer calendario, el sideral-lunar. Este calendario centra su
base en el período que demora la Luna en ocupar la misma posición relativa
entre las estrellas. Este ciclo es de 27,33 días. Doce meses de 27,33 días
arrojan un total de 327,96 días (328 días). Este número coincide con el total
de Huacas (sitios ceremoniales sagrados) que los Incas colocaron en los
alrededores de Cuzco.
Si
este calendario sideral-lunar es cierto, los ciclos de tiempo inca también
estaban determinados por la visibilidad del conglomerado de estrella "Las
Pléyades", ya que la resta entre el año solar y el año sideral-lunar
(365-328) arroja el valor de 37 días, exactamente los días en que este cúmulo
estelar abierto no es observable desde Cuzco.